‘Comunícate MEJOR para lograr el ÉXITO’
Uno de los aspectos comunes a todo aquel que te rodea, que percibes como exitoso en su vida, es el saber comunicarse bien con las personas que le importan.
El saber comunicarse bien no es una aptitud innata, sino que aprendemos desde pequeños mediante los dos mecanismos fundamentales a disposición del ser humano: Modelo y Ensayo-Error.
El modelo no lo puedes cambiar, te han tocado una familia, unos amigos, unos socios, unos colegas específicos, en un contexto determinado, con unos condicionantes invariables y con sus propias limitaciones fruto de su propio Modelo.
Elige tus batallas, trabaja en aquello que sí puedes cambiar. Atrévete a recorrer el camino del Ensayo y Error, disfruta del proceso de mejorar tu comunicación con los demás. Muévete fuera de tu zona de confort mostrándote con una nueva versión de ti, tu mejor versión.
Si te identificas con los 10 aspectos descritos a continuación, te comunicas razonablemente bien. Aquellos ítems de los que te sientas más alejado, son tus áreas de oportunidad. Trabajándolas adecuadamente con ayuda externa lograrás comunicarte mejor y ser más exitoso.
Al conversar, escuchas más que hablas
¿Cuántas veces simulas escuchar sin realmente hacerlo?, ¿cuántas veces te anticipas y no adivinas lo que viene?, ¿cómo cambia tu nivel de escucha en función de la persona que está hablando?. Si no entrenas tu capacidad de escucha te perderás una buena parte del mensaje. Pero, ¿qué implica saber escuchar?.
Se estima que aproximadamente el 85% de nuestra comunicación es no verbal. Miradas, gestos, posturas, el contexto elegido, los silencios, el tono de voz, transmiten más información que el mensaje verbal. No te centres en el Qué y presta atención al Cómo.
No recurres a otras personas para resolver disputas con tus interlocutores
Es una inclinación innata del ser humano el intentar involucrar a un tercero en una conversación cuando detecta que no está fluyendo adecuadamente.
Has de llegar hasta el final del proceso sin dar entrada a tu ‘salvador’, comunicándote de forma asertiva, sin desviar la mirada, sin juzgar a tu interlocutor y sin sentirte obligado a pensar, decir o hacer cosas con las que no estás de acuerdo.
Sabes identificar y nombrar las emociones de tu interlocutor
Las personas nos movemos por emociones, la generación de una emoción promueve la acción. Están categorizadas más de 200 emociones diferentes pero, ¿cuántas serías capaz de nombrar?. El lenguaje nos proporciona la capacidad de distinguir aquello que nombramos. Si no eres capaz de nombrar una emoción no puedes ser capaz de identificarla.
Tus reuniones, familiares o profesionales, son muy divertidas
Experimentas una sensación de fluidez, te cargas de energía positiva, esa noche descansas mejor, tus interacciones están carentes de juicio y muestras un interés genuino por la vida de los demás. No sabes por qué pero te apetece volver a compartir tiempo con esas personas.
Compartes tiempo con quien quieres, sin una disculpa o motivo específico para hacerlo
A aquellas personas con las que te comunicas bien sientes la necesidad de incorporarlas a tu vida ordinaria. No precisas de un cumpleaños, de la Navidad o del Thanksgiving Day para estar con ellas. Las necesitas cerca, con frecuencia, hacen tu vida mejor, hacen que seas más feliz.
Te conoces a ti mismo, siendo plenamente consciente de lo que sientes y deseas en cada momento
El autoconocimiento es la base de las habilidades sociales. Una persona socialmente hábil tendrá menos dificultades para una correcta comunicación interpersonal. Trabaja en descubrir aquello que realmente quieres y no te dejes manipular. Sólo importa lo que tú quieres de verdad.
Te aceptas incondicionalmente, sin depender de tus logros ni de la aceptación de los demás
Quiérete a ti mismo, no te juzgues, no te quedes anclado en tus errores, disfruta inmensamente de tus virtudes y trabaja en mejorar tus áreas de oportunidad.
Sabes comprender y manejar tus sentimientos y los de los demás
Eres capaz de establecer relaciones empáticas, sabes ponerte en el lugar del otro, experimentando intensamente sus emociones y sentimientos.
Das una imagen de persona congruente y auténtica
Existe absoluta coherencia entre lo que piensas, lo que dices y lo que haces. Los demás lo detectan porque perciben un correcto alineamiento entre tu comunicación verbal y no verbal.
Expresas tus opiniones y sentimientos, en vez de esperar a que los demás los adivinen
El responsable de establecer una comunicación adecuada con los demás es el emisor del mensaje. Los otros no tienen la obligación de adivinar qué puedes estar pensando o sintiendo en cada momento. No temas expresar lo que piensas y no te sientas mal cuando los demás no te tienen en cuenta. No son adivinos, sólo interpretan lo que transmites.